El Reino de Tonga en Oceanía cumplen este jueves 11 días sin conexión a internet, debido a que las autoridades todavía no han podido reparar el cable submarino que conecta la nación con el resto del mundo.
Tonga se desconectó del mundo virtual cuando el cable de fibra óptica fue cortado. Inicialmente se perdió acceso a internet casi por completo, y no se podían hacer llamadas telefónicas internacionales.
Se restableció acceso limitado vía satélite, pero las autoridades bloquearon el uso de redes sociales para la mayoría de las personas a fin de preservar el ancho de banda.
Piveni Piukala, director de Tonga Cable Ltd., la empresa que opera el cable, dijo a The Associated Press que cree que un barco cortó el cable en varias partes al arrastrar un ancla sobre el lecho marino.
Agregó que los expertos están reparando el cable y esperan concluir el trabajo la tarde del viernes, y entonces podrán realizar pruebas a fin de tener restaurado el servicio para el fin de semana.
Las reparaciones costarán más de un millón de dólares, señaló Piukala, dinero que la compañía no puede darse el lujo de gastar e indicó que su prioridad ha sido restaurar el acceso a internet para las agencias de gobierno e industrias como aerolíneas y bancos.