NUEVA YORK — El alcalde Eric Adams anunció que brindará botones de pánico a unas 500 bodegas de la Ciudad de Nueva York para que el personal pueda utilizarlas en caso de emergencia y contactar al Departamento de la Policía de la ciudad.
Adams dio el enuncio el domingo resaltando la financiación de 1.6 millones de dólares para poder brindar esta herramienta a las bodegas de la ciudad. Los botones, conocidos como SilentShields, se instalarán en las bodegas con los niveles más altos de delincuencia para mejorar la seguridad del personal y los clientes.
Estos se conectarán directamente a las cámaras de la bodega y al NYPD, lo que permitirá a los agentes ver los delitos en tiempo real, responder con mayor rapidez y ayudar a salvar vidas.
«Las bodegas son parte del corazón de la Ciudad de Nueva York. Están en cada esquina; nos acompañan a todas horas. Este programa brindará tranquilidad a los propietarios de nuestras bodegas, a la vez que protegerá a la clase trabajadora neoyorquina que trabaja y frecuenta las bodegas. Nuestras bodegas son esenciales para la Ciudad de Nueva York y, con esta inversión, les decimos a estos pequeños negocios: su ciudad los respalda», dijo el alcalde.
“Los SilentShields son un punto de inflexión para los trabajadores de bodegas de la Ciudad de Nueva York”, dijo Fernando Mateo, portavoz de la Asociación de Bodegas Unidas (UBA). “Durante demasiado tiempo, los trabajadores de bodegas han sufrido en silencio, mientras la ayuda estaba fuera de su alcance. Pero hoy, ese silencio termina. Se trata de salvar vidas, devolver la tranquilidad y dejar claro que Nueva York ya no abandonará a sus trabajadores esenciales de bodegas”.
La UBA solicitará ofertas competitivas para la tecnología SilentShield y tiene como objetivo comenzar la instalación en los próximos meses.
Los bodegueros recibirán entrenamiento para saber cuándo usar los botones de pánico.
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