El líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, dijo a los periodistas que está “bien”, luego de una pausa en la que se quedó prácticamente en blanco en medio de una conferencia de prensa el miércoles, como si no pudiera recordar lo que iba a continuar diciendo.
El senador McConnell, un republicano de Kentucky, dejó de hablar abruptamente en medio de su conferencia de prensa semanal programada regularmente en el Capitolio.
McConnell comenzó la conferencia de prensa semanal de liderazgo del Partido Republicano diciendo que los legisladores estaban en camino de terminar un importante proyecto de ley de presupuesto de defensa esta semana.
“Hemos tenido una buena cooperación bipartidista y una serie de…”, dijo McConnell y se quedó “congelado”.
Después de una pausa de 20 ó 30 segundos, sus colegas lo rodearon para ver si estaba bien y le preguntaron cómo se sentía. Se vio al senador republicano John Barrasso de Wyoming agarrando el brazo de McConnell y susurrándole: “Oye, Mitch, ¿algo más que quieras decir? ¿O deberíamos volver a tu oficina? ¿Quiere decir algo más a la prensa?”.
McConnell no contestó y un ayudante lo condujo fuera de la conferencia de prensa y hacia su oficina. El líder de los republicanos en el Senado regresó a la conferencia de prensa unos minutos después.
Un poco después, cuando un periodista le preguntó qué le pasó y si está relacionado con su caída a principios de este año, McConnell dijo: “No, estoy bien”, y luego pasó a contestar a otros reporteros.
Un asistente de McConnell dijo que el senador “se sintió mareado y se alejó por un momento”.
“Regresó para manejar preguntas y respuestas, que como todos observaron fue agudo”, dijo el asistente.
El líder de la mayoría demócrata del Senado, Charles E. Schumer, quien habló en la conferencia de prensa de los demócratas inmediatamente después, cuando se le preguntó qué había sucedido, dijo a los periodistas: “Siempre le deseo lo mejor al líder McConnell”.
McConnell, de 81 años, se ha enfrentado a preguntas sobre su salud después de sufrir una conmoción cerebral y costillas rotas por una caída a principios de este año. Fue hospitalizado y obligado a ir a rehabilitación durante varias semanas antes de regresar al Senado en la primavera.
La situación por la que pasó el miércoles es el último recordatorio de la avanzada edad y la frágil condición del principal republicano en el Senado, lo que genera dudas sobre su futuro.
FUENTE: LAOPINION