Conocido en Colombia como «Gerard» o como el «Pablo Escobar ecuatoriano», Washington Prado Álava fue extraditado a Estados Unidos desde Colombia este sábado.
La justicia de EE.UU. buscaba al ecuatoriano por supuestamente traficar más de 250 toneladas de cocaína en la última década.
Prado Álava está acusado de operar en toda América y de ordenar asesinatos de jueces, fiscales y policías en Ecuador, según la Fiscalía colombiana.
«Washington Prado Álava es considerado uno de los mayores capos de los últimos años y se había convertido en un objetivo importante para EE.UU.», señaló la Fiscalía en un comunicado.
«Se le atribuye poder y capacidad de sobornos muy altos», agrega el mensaje.
¿Cómo cayó, entonces, en manos de las autoridades?
Máximo control
Prado Álava controlaba «todos los eslabones de la cadena (de tráfico de drogas), como estructuras de producción, logística, ruta marítima, despachos y comercialización de sus cargamentos de cocaína», dijo la Policía de Colombia en abril de 2017, cuando lo detuvo.
De esta manera, Prado no dependía de otras «organizaciones».
«Lo interesante de su historia es que fue un narco como los de ‘los viejos tiempos’ (que se ocupaba de todo el proceso)», dijo Boris Miranda, corresponsal de BBC Mundo en Colombia. «De ahí la comparación con Escobar, que controlaba toda la cadena. Ahora por lo general cada capo se ocupa de un segmento del circuito».
Aunque «Escobar llegó a controlar el 80% de la cocaína que llegaba a EE.UU.», aclara Miranda, y Prado, un porcentaje «mucho menor». continua leyendo..